Manifiesto

Veinte Centavos surge por la necesidad de crear un espacio en el cual podamos escribir y debatir sobre diversos temas culturales. Literatura, música, cine y teatro serán nuestros temas habituales, y no dejaremos de lado la actualidad, en la que se combina el pasado y el futuro.Aprovechando la tecnología, creamos está revista virtual, este blog cultural, y esperamos que ustedes disfruten leyendo –y respondiendo- y nosotros escribiendo.

Nueva sección: Escuchá qué letra

Visiones de Johanna
por Bob Dylan





¿No es propio de la noche confundirte cuando tratas de evitarlo?
Estamos equivocados, aunque nos esforcemos por negarlo
Y Louise sostiene un puñado de lluvia, tentándote para desafiarlo
Las luces parpadean en el loft de enfrente
En esta habitación la calefacción tose
La emisora de country suena suave
Pero no hay nada de nada que apagar
Sólo Louise y su amante entrelazados
Y estas visiones de Johanna que me asedian.

En el solar donde las damas juegan a la gallina ciega con el llavero
Y las noctámbulas murmuran escapadas en el tren “D”
Podemos oír al sereno encender su linterna,
Preguntarse si es él o son ellas quien está loco Louise está bien, tan sólo cerca
Es delicada y se parece al espejo
Pero deja perfectamente claro
Que Johanna no está aquí
El fantasma de la electricidad aúlla en sus huesos faciales
Donde estas visiones de Johanna ya ocupan mi lugar.

El niñito extraviado se toma tan en serio
Se jacta de su desgracia, le gusta vivir al límite
Y cuando menciona el nombre de ella
Menciona un beso de adiós
Tiene arrestos ser tan inútil
Soltar nimiedades cuando estoy en el salón
¿Cómo lo explico?
Oh, es tan difícil seguir
Y estas visiones de Johanna, me desvelaron hasta el alba

Dentro de los museos, el Infinito va a juicio
Las voces repiten que a la postre así debería salvarse
Pero Mona Lisa debe haber sentido nostalgia de autopista
Se ve por el modo en que sonríe
Mira cómo se congela ese alhelí ancestral
Cuando las mujeres de rostro gelatinoso estornudan
Escucha a la bigotuda, “Jesús, no puedo encontrar mis rodillas”
Oh, joyas y anteojos cuelgan de la cabeza de la mula
Pero estas visiones de Johanna, hacen que todo parezca tan cruel
El vendedor ambulante le habla a la condesa que finge preocuparse

Diciendo, “Nombra a alguien que no sea un parásito y saldré y rezaré por él”
Pero como Louise suele decir “No puedes abarcar mucho, ¿verdad, tío?”
Y ella misma se prepara para él
Y Madonna sigue sin aparecer
Vemos que la jaula vacía se oxida
Donde su capa teatral ondeaba
El violinista se pone en camino
Escribe que se devolvió lo debido
En la parte trasera del camión de pescado que carga
Mientras mi conciencia estalla

Las armónicas tocan las llaves maestras y la lluvia
Y estas visiones de Johanna son lo único que queda

1 comentario:

Ina dijo...

Hermosísimaa canción de Bob! Una de esas que se tararean aún con auriculaes y en el medio de la calle!