Muchas veces las ideas que en algún momento se transforman
en proyectos no logran pasar de esa etapa. Sin embargo el hecho de que no se
concreten no lleva al fracaso. Y es ahí donde frases que pueden resultar
trilladas cobran sentido.
Años atrás me puse en contacto con uno de los personajes de
celebres de Ituzaingo con el fin de grabar entrevistas para hacer un
documental. Busqué información, vi
películas en las que había trabajado, leí entrevistas… digamos que me tomé
el trabajo en serio.
La conversación fue breve. Le conté qué quería hacer y él
aceptó en seguida. Creo que no entendió cuál era mi objeto pero estaba
encantado con que chicos jóvenes vayan a escucharlo.
Fuimos a la casa con una cámara y luces para grabar la
entrevista. Entrevista que sería el puntapié inicial para el fallido documental sobre su vida.
Estuvimos cerca de tres horas.
Nos contó historias
sobre su padre (uno de los fundadores del Teatro del Pueblo), de las andanzas
con su hermano (también actor), sobre su único amor (Negrita) y sus hijos y
nietos.
Nos contó que en una vista a Chile ante la prensa dijo que
estaba feliz de estar en la tierra de su poeta preferido Pablo Neruda, sin
saber que estaba prohibido.
Nos contó que Narciso Ibañez Menta le dio su gran oportunidad
cuando le ofreció el papel del hijo en Muerte de un viajante.
Nos contó que estaba harto que siempre lo recuerden como el
primero que besó a Lolita Torres.
Nos contó que sufrió la censura por ser el hijo de un hombre
de ideas de izquierda y le suspendieron todos los contratos.
Nos contó que empezó a dar clases para sobrevivir y
descubrió que tenía una pasión oculta.
Nos contó que Favio lo había llamado para su proyecto nuevo:
El mantel de hule.
Nos contó mucho
Ricardo.
1 comentario:
Que lindo recuerdo.
Publicar un comentario